La eurodiputada Maite Pagazaurtundúa se encuentra en Madrid, donde ha organizado coloquios sobre la libertad de expresión y la autocensura, en el Espacio Ciento y Pico, donde también se presentan fotografías, carteles y distintas manifestaciones de “Arte sin miedo”. En ese contexto, la eurodiputada responde a las preguntas de El Mundo y Yo Dona sobre la crisis de UPyD y hace autocrítica: “No hemos sido eficaces”, admite. Sobre Rosa Díez señala que “puede haberse equivocado al elegir un camino más cómodo o una forma de política más convencional, es así. Uno de nuestros fallos ha sido la vanidad intelectual”.
También afirma que los compañeros de UPyD que abandonan el barco “optan por Ciudadanos porque ven más posibilidades de ser elegidos”.
¿Se está desintegrando UPyD?
No, pero es una crisis en la que una parte de las personas que tenían expectativas de obtener un buen resultado electoral van a optar por estar en listas de “Ciudadanos” porque ven más opciones de poder ser elegidos. El Consejo Político de UPyD decidió que teníamos que presentarnos con un proyecto autónomo a las elecciones locales y autonómicas y después hacer un congreso extraordinario. Hay que regenerar todo lo que ha quedado dañado y pensar también en nuevas bases para tirar hacia adelante. La crítica y la reflexión son necesarias para entender por qué con un buen proyecto y un buen trabajo, en muy poquito tiempo, no hemos sido para nada eficaces en la transmisión de ese trabajo a los ciudadanos.
¿Se va a quedar sin representación institucional UPyD en las elecciones locales y autonómicas?
No lo creo. Los candidatos que han decidido seguir con UPyD son gente de un temple extraordinario porque en los momentos de dificultad es cuando se ven las condiciones políticas, personales y morales. Es gente extraordinaria porque lo fácil ahora mismo es criticar a Rosa Díez e intentar una lista cremallera, de forma leal o desleal, porque de todo hay en un momento de crisis. Los candidatos de UPyD son gente templada y resistente a cualquier tipo de tentación, gente insorbornable y recia, que es lo que hace falta en este país. La tentación de salvar el bipartididsmo con una operación de maquillaje está ahí. Ser bisagra de cualquier manera es una tentación. UPyD es una garantía doble y quienes llevan adelante el mandato del Consejo Político son gente extraordinaria que merece tener representación. Fernando Buesa me enseñó hace muchos años que no hay que tener obsesión por ganar, sino el deseo firme de aportar aquello que tú sabes hacer. Cuando tienes que volver a ganarte la ilusión y la confianza de la gente, hay que hacerlo con toda la humildad. No se trata de ir con el que está mejor situado, sino de hacer lo que tenemos que hacer. Hay que ser humilde y ésa es una de las lecciones que vamos a aprender.
¿UPyD muere de éxito y de soberbia? ¿Si Rosa Díez hubiera pactado con “Ciudadanos” habría evitado la guerra civil en sus filas?
No lo sé. Ha habido durante mucho tiempo un afán por intervenir en la política de alianzas y estrategias del partido y eso crea resistencias. No es aceptable esa injerencia.
Toni Cantó ha abandonado todos sus cargos pero Enrique Calvet quiere seguir siendo eurodiputado independiente. ¿Le parece ético? ¿el escaño es del partido o de la persona?
Los afiliados conocen los estatutos y está establecido que si uno abandona su vinculación con el partido, debe renunciar al escaño. Cuando se abre un expediente y se resuelve contrariamente, también debe abandonar el escaño. En España sabemos que hay gente que prefiere mantener el escaño, pero eso no es aceptable. Todos los partidos políticos del arco general consideran que el transfuguismo no es aceptable. Si alguien se presenta por unas siglas y cambia de opinión, debe hacer como Toni Cantó o Paco Sosa Wagner, dejar esa representación si no se siente a gusto.
Irene Lozano va a disputar la dirección del partido a Rosa Díez en el congreso extraordinario de junio y ya anuncia que espera contar con Toni Cantó, Álvaro Anchuelo y otros críticos. ¿Se puede interpretar como el famoso dicho popular “cría cuervos que te sacarán los ojos”?
La Constitución exige democracia interna en los partidos políticos y quien quiera presentarse, debe hacerlo. Somos adultos y no estamos bajo la tutoría de ningún dicho castellano, que significaría que alguien patrimonializa lo que es correcto o incorrecto. Cada cual puede defender sus opiniones, ser discrepante con la dirección, formar parte de ella, abandonarla…todo eso forma parte de la libertad personal.
¿Se ha planteado renunciar, dimitir o iniciar una nueva vida política, en Ciudadanos o en cualquier otra formación?
No lo he pensado en ningún momento. Me costó mucho volver a la vida política y pensé durante muchos años que nunca repetiría la experiencia. No me arrepiento de haber vuelto a la política activa, que por otra parte es algo que nunca he visto como algo indefinido. Como ciudadana he considerado que este momento histórico que estamos viviendo requiere responsabilidad e implicación de los ciudadanos. Yo me he implicado en lo que puedo y sé, modestamente. No me gusta abandonar las cosas a medias. Tengo muchos proyectos, ganas y energía, para responder a los ciudadanos que votaron en las europeas. No me he planteado nada de eso.
¿En qué se ha equivocado Rosa Díez?
No es una cuestión sólo de Rosa Díez, porque hay todo un equipo de dirección que ha cometido errores. Tenemos que reflexionar en ese congreso extraordinario y ahí podremos extraer conclusiones. Hay errores clarísimos: No hemos sido eficaces. Hemos trabajado de forma muy intensa en cambios que se refieren al modelo de Estado, para que todos los ciudadanos tengan los mismos derechos en educación o en sanidad y que eso no pueda ser utilizado por intereses caciquiles. También en igualdad de oportunidades, para que nadie se quede atrás porque de repente los ministros deciden que la universidad va a ser más cara y menos igualitaria. Son brújulas de UPyD y lo que está claro es que los países fracasan por el liderazgo. ¿En qué ha fallado nuestro liderazgo? Lo tenemos que analizar con toda humildad.
¿El liderazgo de Rosa Díez hace aguas? ¿UPyD era Rosa Díez?
Rosa Díez es una persona extraordinaria, con sus aciertos y sus errores. Su instinto no suela fallar en aquello que es importante para nuestro país. Cuando ella expresa, junto con la mayoría de representantes de UPyD, que quieren un proyecto autónomo, significa que la regeneración que hace falta en este país no se quede a medias. Sabemos lo dura que es trabajar en la política española y las presiones que existen para ablandarse un poco. Como en El Buscón de Quevedo, si no cambiamos los modos y las circunstancias, se vuelven a repetir los mismos problemas. Para que la regeneración del bipartidismo no quede en maquillaje, hace falta que ese instinto supere cualquier presión o halago. Rosa Díez puede haberse equivocado en elegir un camino más cómodo o una forma de política más convencional, es así. Pero si lo miramos desde el punto de vista de instinto y de voluntad de cambios para el país, ahí no se ha equivocado. UPyD como elemento de doble garantía puede funcionar, aunque sea pequeño. Siendo pequeño ha influido muchísimo. Como si esto fuera el juego de la Oca, hemos retrocedido en las casillas. Eso significa que tendremos que volver a empezar a trabajar de nuevo y ver si somos capaces de ganar la credibilidad y la confianza. Nuestro fallo no tiene que ver con la corrupción, ni con haber estado a favor de asesinos, que en nuestro país hay de eso. Tiene que ver con la voluntad. Uno de los fallos puede haber sido una cierta vanidad intelectual, no lo negaré.
¿Qué le parecería que Rosa Díez impulse a Andrés Herzog para sucederla?
Me parece estupendo. Es una persona muy competente, muy trabajadora y con una enorme vocación de servicio. Es una persona notable, una buena aportación y un buen ciudadano.
¿Se siente de entierro, al final de una época o que se ha equivocado al apostar por UPyD?
Nunca he apostado por mayorías o por lo cómodo. Si hubiera sido así, habría estado cómodamente en el PNV y no habría tenido muchos problemas personales, profesionales y políticos. Hace muchos años que entendí que en la vida uno opta. UPyD sigue siendo un instrumento de garantía para cambiar cosas en este país, que nos hacen más pobres y menos competitivos, y para que articulemos de una forma inteligente el talento y la igualdad de oportunidades. Creo que eso sigue siendo importante, ahora bien, tenemos que ser eficaces y aprender mucho. Vamos a ver si somos capaces de enmendarnos y que nos den una oportunidad. Aunque seamos pequeños, queremos seguir influyendo en la política española.
¿Qué es lo que le ha dolido más personalmente…el goteo en las salidas, la candidatura alternativa de Irene Lozano?
Lo que me preocupa es no dar todo lo que podemos dar a los ciudadanos. Yo no he parado de trabajar en proyectos. Lo más importante de lo que tenemos que hacer no son las cuestiones internas. Yo no suelo tomarme las cosas en política en clave personal. No me parece que sea la perspectiva. No quiero es fallar a los ciudadanos que me han elegido. Tenemos que arreglar las cuestiones internas, pero creo que tenemos que ser capaces de arreglar una crisis y además trabajar. Me preocupa toda la gente buena que necesita que los políticos del siglo XXI seamos capaces de superar todo ese egocentrismo. Cuando uno comete un error debe asumirlo y debe seguir trabajando y aprender de los errores. Sin melancolía, hay que pensar en el futuro. Hay cosas de las que tenemos que aprender para ser merecedores de la confianza de más ciudadanos.
https://youtu.be/SVQGscZlCjw