Debate publicado en la revista YO DONA el 9 de febrero de 2013. Participaron Rosa Díez, portavoz de UPyD en el Congreso de los Diputados, quien dijo que es imposible regenerar la política sin una Justicia independiente, y Elena Biurrun, Alcaldesa de Torrelodones y líder de una agrupación de vecinos, quien pidió un cambio de caras en la política española.

Crece la indignación: En medio de una crisis económica que aboca a muchas familias a la exclusión social, aparecen nuevos escándalos de enriquecimiento ilegal. Los casos de Urdangarín; Bárcenas, Jaume Matas, la trama Gürtell, los Pujol, o el fraude de los ERES de Andalucía, han saltado a las portadas. Más de 300 políticos españoles están imputados en casos de corrupción.

La encuesta del CIS de diciembre de 2012 colocó a los partidos y a sus dirigentes como uno de los grandes problemas de los españoles.

Y precisamente de cuáles son las claves de la regeneración política hablamos con dos mujeres que constituyen un símbolo: Rosa Díez, la política más valorada de España. Y Elena Biurrum, que ha llegado a la alcaldía de Torrelodones encabezando un movimiento ciudadano contra la corrupción.

Ambas niegan que todos los políticos sean iguales. La alcaldesa considera “necesaria una nueva generación de dirigentes que defiendan el servicio público para ir construyendo desde abajo”. La diputada afirma que hay políticos corruptos porque la gente les vota.

Ver video: http://www.elmundo.es/yodona/bidi/2013/02/406/tertulia/

¿Faltan políticos en la cárcel?

Rosa: Hay muchos corruptos e irresponsables que no están en la cárcel y algunos son políticos, pero otros son empresarios o banqueros. Falta una Justicia independiente, eficaz y rápida, que no proteja al clan, para que los ciudadanos recuperen la confianza. Cuando la gente pasa de la política y de votar, llegan a las instituciones personas que pasan de los ciudadanos. Sin política no hay democracia.

Elena: Si no votas, no te quejes. Faltan políticos en la cárcel, claro que sí, y que se aplique la Ley por igual a todos. Tenemos que dar ejemplo.

¿Cuáles son las claves de la regeneración política?

Rosa: Los partidos tienen que sacar la mano de los órganos judiciales para que se puedan perseguir y condenar los escándalos de corrupción. La politización de la Justicia y de entidades financieras está en el origen de la crisis política, económica y social. ¿Acaso los miles de millones que hemos metido en el sistema financiero no tienen que ver con el control de los partidos sobre las cajas de ahorros? Eso es corrupción también.

Elena: Es fundamental acabar con la impunidad y que se asuman responsabilidades. La Ley Electoral tiene que cambiar. Mi voto tiene que valer igual que el de otro ciudadano. Si los partidos mayoritarios no están por la regeneración democrática, debemos reaccionar desde la calle y decir: Se acabó. Tenemos que movilizarnos.

¿Cómo se acaba con la corrupción?

Rosa: Con el delito de enriquecimiento ilícito, por ejemplo, porque la financiación ilegal hoy no está penada en España. Los grandes acuerdos sobre corrupción no valen,  si no cambian las leyes. La clave de la regeneración está en devolver a los ciudadanos el control sobre partidos, políticos e instituciones. También requiere cambiar la Ley Electoral: Son necesarias listas abiertas, para que se pueda tachar al secretario de organización y elegir al barrendero, ingeniero o profesor, conocidos por su buen hacer.

Elena: Es necesaria una nueva generación de políticos que aplique un criterio de transparencia. Todo lo que hacemos tiene que ser público. Nada va a cambiar mientras sigan dictando leyes quienes no creen en ellas. Los delitos de algunos prescriben o se aprueban indultos polémicos, mientras el drogadicto que está reinsertado tiene que volver a la cárcel. ¿Estamos locos o qué?

¿Hay que hacer auditorías externas de los partidos?

Rosa: Tiene que trabajar el Tribunal de Cuentas, ahora, no dentro de 20 años, cuando se hayan muerto los tesoreros.

Elena: Y de forma coordinada, Agencia Tributaria y Tribunal de Cuentas, para evitar la impunidad. Según la auditoría externa de Bankia, todo era estupendo. En Torrelodones, los expedientes pasan la fiscalización de la Intervención municipal. Los órganos de control existen, pero hay que hacerlos funcionar.

Rosa: El dinero negro nunca está en las cuentas. ¡Qué falta de respeto a la gente! Si se han lucrado particulares a la sombra del partido, que denuncien a la Fiscalía. El resultado tendrá consecuencias legales y la auditoria, no. Si no van ellos, iré yo.

Elena: ¿Y la Fiscalía por qué no actúa de oficio? Es escandaloso

Rosa: ¿Por qué he tenido yo que ir a la Audiencia Nacional a denunciar el caso de Bankia? No ha ido otro partido. Tendrían que haber declarado Rajoy, Cayo Lara y Rubalcaba, que nombraron a los que estaban en Bankia. Y acabarán yendo.

¿Es necesario un gran pacto de Estado sobre la corrupción?

Rosa: Si cambian las leyes, sí. Si no aceptan condenar la corrupción, conmigo que no cuenten. Y si no rompen el pacto PP-PSOE para controlar la Justicia, que no me llamen. El pacto tiene que acabar con la impunidad. La corrupción en España no está generalizada: está institucionalizada. Ningún imputado va en listas de UPyD.

Elena: Los ciudadanos también son responsables, cuando votan listas con imputados. ¿Hay voluntad de llegar a un pacto? Un partido que ha estado en el Gobierno y en 8 años no ha sacado adelante la Ley de Transparencia, demuestra poco interés. La información es poder, pero ellos no quieren soltar ese poder.

¿La ley de Transparencia va a cambiar algo?

Rosa: Hay que hacer una ley orgánica, para garantizar el acceso a la información, por encima de la protección de datos. La que plantean tiene un objetivo administrativo.

Elena: Si la Ley de Transparencia no es orgánica, no vale.  Soy muy escéptica porque la defienden los mismos que en otras administraciones no la aplican y además se ríen. ¿Transparencia en la administración local?: aún falta mucho para lograrlo.

Incompatibilidades: ¿Hay que endurecer la Ley?

Elena: Hay que aplicarla y reforzarla. En casos como el de Juan José Güemes o Elena Salgado: ¿Es una cuestión de tiempo la incompatibilidad o también de ética? ¿la ética se regula?

Rosa: Lo mejor: pocas leyes, claritas para evitar interpretaciones y que se cumplan.  ¿Son los políticos españoles más corruptos que los alemanes o británicos?: No. Lo que pasa es que en Alemania el ciudadano no les perdona y, como le pillen, no le vuelven a votar.

¿La política tiene que dejar de ser un modo de vida?

Elena: Prefiero al político con experiencia en otros campos que al cachorro del partido que se dedica a medrar, para cobrar toda la vida. La limitación de mandatos es necesaria: te vas y luego vuelves, pero se regenera la institución.

Rosa: Es clave tener donde volver: Yo soy funcionaria del Estado y eso da libertad.  Cuando a un chaval que no ha terminado sus estudios le haces concejal, le has machacado: dentro de cuatro años, ese chico mata a su madre por quedarse. No es lo mismo un político profesional, que el profesional de la política.

Elena: He trabajado en un despacho de abogados y también en publicidad y cine.  No tengo miedo a salir del Ayuntamiento. Es más, estamos en minoría y puede ocurrir que nos manden para casa. No estamos aferrados al sillón. Pero los grandes partidos han sido incapaces de permitir que aparezca gente nueva. Eso decepciona a nuestra generación. Creo necesario un cambio de líderes para que los ciudadanos recuperen la confianza.

Rosa: No bastan cinco caras jóvenes, nuevas y bonitas, para dar imagen de renovación, con gente que no destaca por nada. El cambio es que haya personas con autonomía personal y un proyecto propio.

¿Estamos ante el crack del bipartidismo

Rosa: El bipartidismo se muere: fin de ciclo. Son responsables de lo ocurrido. Pronto decaerá la tensión para tapar todo, porque están afectados por igual. Hay políticos sinvergüenzas, pero como dice Fernando Savater, también hay ciudadanos muy bobos que les votan. Y deciden sobre la vida de tus hijos o tu pensión. Hay que votar en defensa propia. Confío en un estallido democrático, lo que significa elegirnos o mandarnos a casa. Nos va el futuro en ello. Los políticos sin los ciudadanos no somos nada.

Elena: Es fundamental el nacimiento de partidos y movimientos ciudadanos, como la marea blanca de Madrid, que es espectacular. Si el político es incapaz de cumplir su programa, que se vaya. El PP en Madrid arrasó en las urnas, pero no puede ir contra todos. Hay un clamor y ése el estallido social que yo veo: los ciudadanos piden que se les escuche.

Elena Biurrum

Cofundadora de Vecinos por Torrelodones, partido político que se fundó en 2007 y obtuvo 9 concejales en 2011. Nació como movimiento asociativo: “Estábamos hartos del desmadre urbanístico y decidimos frenar un pelotazo para urbanizar una zona protegida, con el sobrino del alcalde por medio. Un vecino denunció que allí no había sobres: eran maletines y sin el “recibí”. Se generó una red de protesta y cuajó. Hemos roto el bipartidismo en Torrelodones. El ciudadano también tiene una cuota de responsabilidad”, dice. Hoy es alcaldesa.

Rosa Díez:

Cofundadora de Unión Progreso y Democracia, partido que nació en 2008, y del que es portavoz y diputada en el Congreso. Abandonó el PSOE después de 30 años de militancia y se puso al frente de una alternativa a los partidos nacionales mayoritarios, con el objetivo de regenerar la política. Es la líder más valorada, según confirman las encuestas de los últimos años. Además, figura en el puesto 25 de la lista de los españoles más influyentes que publica el diario El Mundo. Afirma que está preparada para ser presidenta del Gobierno.

Ver la publicación en la revista Yo Dona: YO_406_09 FEB 2013

 

Tras el debate, la charla continuó entre Rosa Díez, Elena Biurrum y su equipo.